¿ES IMPORTANTE PONER LÍMITES EN LOS HIJOS?

"Nada dice más del alma de una sociedad
que la forma en que trata a sus hijos"
Nelson Madela
En todas las familias se requiere establecer límites, esto permite el respeto entre todos.
Podría decirse que es una de las bases familiares que darán herramientas en la sociedad, quien no respete los límites no convivirá con los demás de manera armónica.  

Los límites son normas que no podemos traspasar, es el muro donde debes detenerte, esto lo vamos enseñando desde pequeños en casa, gracias a la educación que proporcionan los padres a sus hijos, también lo encontramos en las escuelas, que generalmente son los lugares donde viven o frecuentan los niños.
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Mientras vamos estableciendo dichos límites al pequeño se le muestra que si se mantiene dentro de estos le dará seguridad, porque se sentirá protegido, esto significa que no se saldrá del límite, además que no será sancionado por ello, estará tranquilo.

El niño entenderá que debe seguir las reglas dentro y fuera de su casa, lo que fomentará en él mejores habilidades sociales, y su buen comportamiento le ofrecerá oportunidades de convivir con los otros sin problemas. Además los hijos tendrán un buen autoconcepto y tolerarán la frustración cuando no puedan realizar acciones que quieran y no puedan hacerlo.

Cuando llegan a mi consultorio por motivos de conducta de los pequeños he notado que en ocasiones son porque no se establecieron adecuadamente los límites en casa y eso sobrepasa a otras áreas donde se desenvuelve el niño.
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Los padres se quejan de que su hijo o sus hijos no saben obedecer, les contestan, hacen lo que no deben, se burlan y gritan, existen golpes de ellos hacia los padres, etc., estos signos son parte de esta falta de límites, y se preguntan "¿cómo podemos establecer esos límites, si ya lo hemos intentando anteriormente?

Les he preguntado cómo lo hacen, y sus respuestas oscilan entre, "les doy lo que me piden, ya para que se callen...", "les grito o golpeo...", "me salgo y regreso mucho tiempo después...", "los amenazo con dejarlos en la calle...", en fin, muchas otras respuestas similares.

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Me gustaría decirles que existe una receta para todos los casos, pero no es así, cada niño es diferente, lo que sirve para uno no sirve para el otro, dependerá de su personalidad y temperamento.

En consulta determino que tipo de herramientas utilizaremos para el caso en específico, además de generar tanto en el niño como en el padre compromiso de realizar las tareas que se les indiquen cada semana. Es importante seguir lo que se deja en la sesión, los padres tienen un trabajo mayor porque también deberán realizar transformaciones en sí mismos para lograr que sus hijos cambien lo inadecuado.

Algunos consejos que existen por este medio son:
- Dar instrucciones claras y concretas, si divagan mucho o dejan muchas actividades al mismo tiempo no lo realizarán y se sentirán abrumados por tantas tareas por hacer.
- Sean directos, firmes y dulces, aunque parezca contradictorio, ustedes pueden dar instrucciones mirando hacia sus hijos señalando lo que deben hacer con toda la seguridad posible de sus palabras pero sin ser groseros o agresivos.
-  Felicitar cuando realicen sus tareas, no es necesario premiarlos siempre con algo material, las palabras positivas generan en el niño mucha estima en sí mismo.
-   En ciertas edades es conveniente explicar el por qué existen los límites, muy pequeños las reglas son cortitas y concretas sin mucha explicación, conforme crecen se puede explicar, pero no en todas las ocasiones, si ya se le explico anteriormente y él ya sabe sobre el porque debe actuar de cierta manera sólo se deberá dar la indicación.
-  Cuando el niño no realice la actividad o tarea indicada, se le hará el comentario donde se desaprueba lo que hizo, A LA ACCIÓN, nunca les digan a su hijo palabras que desestimen al pequeño como persona. Ejemplo de lo que no se debe decir: "Eres un tonto, no sirves para nada, me avergüenzas y muchas otras palabras altisonantes e hirientes."
Un ejemplo válido para desaprobar la acción es: "No es correcto lo que hiciste..., tu conducta no es apropiada..., puedes lastimarte o herir a los demás..., etc."
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En lo particular les sugiero asistir a un psicólogo infantil si la conducta de su hijo se está desbordando y ustedes junto con él, la terapia cognitiva conductual les proporcionará esas herramientas necesarias para controlar, modificar, pensar, sentir y actuar adecuadamente, tanto en niños como en adultos.

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Fuentes de referencia
La anterior información puede ser encontrada en los siguientes páginas.

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